CREMA FACIAL ECOLÓGICA ARGÁN Y CAMELIA
Una crema facial ecológica Anti-edad y reafirmante enriquecida con aceites de Argán Bio y Camelia Japónica.
Aplicada regularmente, ayudará a la piel a recuperar el tono y la elasticidad, contrarrestando los efectos del tiempo.
Tu piel lucirá más luminosa, hidratada y firme, gracias a las virtudes de los preciados ingredientes naturales presentes en su fórmula. Una textura suave y envolvente, capaz de calmar la dermis al instante. Ideal para el uso diario de cualquier tipo de piel.
La crema facial ecológica argán y camelia es un exclusivo tratamiento anti-edad que protegerá la piel de las agresiones externas gracias al aceite de macadamia y retrasará los primeros signos de la edad así como el envejecimiento cutáneo: líneas de expresión, arrugas, pérdida de elasticidad, luminosidad y tonicidad.
Ayuda a tu piel a rejuvenecer, logrando una piel jugosa y dejando atrás los rostros apagados y con signos de fatiga.
Modo de empleo: Aplicar sobre la piel limpia en rostro y escote y masajear suavemente hasta su total absorción.
Contenido: 50 ml.
Certificados: Natrue y CCPB Vegano.
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ingredientes destacados
Aceite de Argán
El aceite de argán es rico en antioxidantes que ayudan a proteger contra el daño ambiental, como los polifenoles y la vitamina E. Esta vitamina es muy apreciada en el cuidado de la piel por sus propiedades antienvejecimiento y suavizantes de la piel. Ambos ayudan a eliminar los radicales libres, ayudando a mantener la juventud de la piel. El aceite de Argán contiene carotenoides, polifenoles, ácido ferúlico, escualeno y vitamina E, que son potentes antioxidantes.
El aceite de Argán también es extraordinariamente rico en ácidos grasos, entre los que destacan el ácido oleico (Omega 9) y el ácido linoleico (Omega 6). Mientras que el ácido linoleico reducirá la inflamación y el acné y aumentará la humedad de la piel, el ácido oleico puede mejorar la permeabilidad de la piel y ayudar a que otros ingredientes penetren en la piel más fácilmente. Por esta razón, el aceite de Argán se considera apropiado para todo tipo de pieles.
La excelente combinación de activos del aceite de argán, lo convierten en un ingrediente muy preciado en los tratamientos de belleza del cuidado de la piel.
Aceite de Camelia Japónica
El aceite de camelia (también conocido como aceite de “semilla de té”) es originario de Japón y se ha utilizado históricamente para el cuidado de la piel y el cabello. El aceite en sí se extrae de la flor de camelia, o la flor de tsubaki, como se la llama en Japón. También se dice que el aceite de camelia era el secreto de belleza oculto de las geishas sin edad en la cultura japonesa.
El aceite de camelia japónica es una rica fuente de ácidos grasos palmítico y linoleico omega-6, así como numerosos antioxidantes polifenólicos antienvejecimiento. No es graso y es un excelente humectante completo para la piel.
El aceite de camelia es un excelente emoliente para mantener la piel hidratada y flexible. Aproximadamente el 82% de sus ácidos grasos están compuestos de ácido graso oleico (Omega-9), un transportador transdérmico muy eficaz para mejorar la capacidad de la piel para retener la humedad.
El aceite de camelia se absorbe muy rápidamente. Penetra profundamente en las capas inferiores de la piel y promueve el crecimiento celular, aportando flexibilidad a la piel.
Extracto de Yema de Haya
El extracto de yema de Fagus sylvatica (ese es su nombre científico), contiene hidroxiprolina, un ingrediente activo que ayuda a formar colágeno y mejorar la elastina en las células de la piel. Estas yemas también están repletas de vitaminas y activos nutritivos que pueden ayudar a restaurar la piel.
Esta combinación única ayuda a hidratar, reducir la apariencia de líneas finas y arrugas, mejorar el tono y la textura de la piel. Ayuda a fortalecer y reparar la barrera cutánea.
Gracias a su capacidad para reducir las arrugas, rejuvenecer la piel y mejorar la textura y el aspecto general de la piel, es un ingrediente muy apreciado por sus beneficios antienvejecimiento.
Aceite de Macadamia
El aceite de macadamia contiene altos niveles de ácido palmitoleico, un ácido graso omega 7 que ayuda a la piel a mantener la flexibilidad, y también contiene vitamina E y escualeno, nutrientes que pueden ayudar a reducir la inflamación y el estrés oxidativo en la piel.
Tanto el ácido palmitoleico como el oleico ayudan a las células de la piel conocidas como queratinocitos a producir queratina en la capa más externa de nuestra piel. Al igual que el colágeno, la queratina es una proteína necesaria para una piel sana.
La queratina protege la barrera cutánea y trabaja duro para mantener la piel firme. Esta barrera protectora de la piel mantiene alejados a los patógenos que dañan la piel y los factores ambientales potencialmente peligrosos (piense en el humo, la contaminación, los rayos ultravioleta…).
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